Quinto mes del calendario actual; su nombre se deriva
del latín Mayus. Era el mes consagrado a los mayores. Se colocó este mes bajo
la protección de Apolo. En este mes celebraban los romanos las fiestas floralias.
Tiene el mes treinta y un días. Su piedra amuleto es el ágata, desde el
21 de abril al 20 de mayo; proporciona salud a quien la lleva, preserva de los
peligros y conduce al éxito. Está el mes bajo la influencia de Tauro desde el
día 1 hasta el 21, y bajo la de Géminis desde el 22 hasta el final. Días nefastos:
el 16, el 17, el 18 y el 20.
Debemos empezar a recoger la ropa de invierno, sobre
todo la de la casa: cortinas, mantas, alfombras, etc.
Refranes del mes
Mayo festero echa la rueca tras el humero.
El buen madero para mayo lo quiero.
Quien tiene dinero en mayo tiene dinero todo el año.
El mejor cepón para mayo le compon.
Las flores de mayo y su significado
El geranio rosa es el amor poético; el
escarlata, fatuidad. El gladíolo, indiferencia de amor. El lirio
significa pureza; el lirio de los valles, coquetería; el lirio azul,
belleza caprichosa, el lirio tigre, desinterés; el amarillo, símbolo de
majestad; el rayado, lujo. La margarita grande amarilla pregunta: ¿Me
amas?; la pequeña y amarilla contesta: No lo sé aún. La margarita grande blanca
recomienda: Olvida el pasado; la pequeña blanca es símbolo de inocencia; la morada
grande, de imprudencia; la morada pequeña nos dice: Estoy contigo. El nardo
significa cita. El pensamiento dice: Sólo pienso en ti. El pensamiento
silvestre es el símbolo del amor platónico. La rosa es el símbolo de
la belleza y del amor. Si es blanca, significa suspiros de amor; amarilla,
deslealtad; encarnada, amor ardiente; rosa, promesas de amor. La rosa de té
es símbolo de infidelidad; la rosa damascena significa perfidia
encubierta.
Poema mensual
Mayo
A Juan Ramón Jiménez
Era una noche del mes
de mayo, azul y serena.
Sobre el agudo ciprés
brilla la luna llena,
iluminando la fuente
en donde el agua surtía
sollozando intermitente.
Solo la fuente se oía.
Después, se escuchó el acento
de un oculto ruiseñor.
Quebró una racha de viento
la curva del surtidor.
Y una dulce melodía
vagó por todo el jardín:
entre los mirtos tañía
un músico su violín.
Era un acorde lamento
de juventud y de amor
para la luna y el viento,
el agua y el ruiseñor.
«El jardín tiene una fuente
y la fuente una quimera...»
Cantaba una voz doliente,
alma de la primavera.
Calló la voz y el violín
apagó su melodía.
Quedó la melancolía
vagando por el jardín.
Solo la fuente se oía.
ANTONIO MACHADO
(1875-1939)