Enero:
Primer mes del calendario actual; en época de Rómulo
ocupaba el onceavo lugar. Fue Julio César quien lo llevó a la cabeza del
calendario. Su nombre se deriva de Januarius, y estaba consagrado al dios Jano.
Tiene este mes 31 días. El ónice es la piedra amuleto del mes y sirve del 21 de
diciembre al 20 de enero; si la usamos en otra época, produce malos sueños e
incita a la discordia. Influye favorablemente en el sistema nervioso. Este mes
se halla bajo la influencia de Capricornio desde el día uno hasta el día 21, y
bajo la de Acuario desde el día 22 hasta el final. Días nefastos son el 1, el
2, 3, 6, 7, 11 y el 15.
Refranes del mes:
San Silvestre y santa Coloma, cuando el mes de enero
asoma.
El sol de enero no tiene compañero.
Enero, mes de zamarra, buena lumbre agarra.
En las mañanas de enero, ni se dan los buenos días ni
se quitan los sombreros.
Las flores del mes y su significado:
La anémona significa traiciones de amor y celos; la
anémona de los prados presagia enfermedades; la anémona blanca es símbolo del
candor. El eléboro significa el talento, pero es también el emblema de la
calumnia; en el lenguaje de las flores significa: recuperé el juicio.
El poema mensual.
Enero.
Fría y vidriosa, la curva del cielo,
rezumante de luna, inmunda con blancores
la apretada ciudad, toda tendida ahora,
dormida.
Honda se oye la voz del mar.
Un no sé qué temeroso
atraviesa diminuto, la gran plaza un instante…
Y de nuevo blancas,
Desiertas quedan las plazas.
Y en las ramas yertas
ni un estremecimiento… Nada. Hiela.
Joan Maragall
(Traducción del catalán)