Ir al contenido principal

Del 24 al 30 de mayo

 Del 24 al 30 de mayo

Semana de Solidaridad con África

MANUEL IRUSTA (Revista TIEMPO – 1999)

El 24, Almonte (Huelva) estalla con la Romería del Rocío, con multitudinaria peregrinación. El Rocío recuerda la devoción del cazador que descubrió al pie de un tronco de las marismas andaluzas la imagen de Nuestra Señora de los Remedios. Quiso darle cobijo santo y venerado, pero la Virgen eligió el lugar donde había aparecido. Allí levantó una ermita y se la dedicó a Nuestra Señora de la Rocina por el nombre del bosque en que fue hallada, pero desde el siglo XVII se la conoce como del Rocío. El 24 también celebran en Miranda de Ebro (Burgos) las Fiestas de San Juan del Monte, con romería, música y desfile de blusas y carrozas. En 1972 la ONU exhortaba a los pueblos y gobiernos del mundo a que celebrasen cada año a partir del 25 de mayo, día de la liberación de África, la Semana de Solidaridad con los pueblos de todos los territorios coloniales del África, que luchan por la libertad, la independencia y los derechos humanos. El 30 se recuerda a Fernando III El Santo, hijo de Alfonso y Berenguela, que casó con Beatriz, hija del emperador de Alemania, luchó contra los moros, tomó posesión de León a la muerte de su padre y limpió el país de bandidos y asesinos. Empleaba sus botines de guerra en levantar y reparar iglesias. Tiene fiesta en diversos pueblos de España.

Comentarios

Entradas populares de este blog

Refranes, dichos, pensamientos de un almanaque del 1967

REFRANES, DICHOS, PENSAMIENTOS DE LAS AGENDAS, CALENDARIOS Y ALMANAQUES DE FEBRERO DE 1967 1.       A la luz de la candela, toda rústica parece bella. Refranero 2.      Malo es el consejo que no puede variar. P. Siro 3.      Mujer hermosa y arma de fuego para mí no las quiero. Refranero 4.      Calumnia audazmente: siempre quedará algo. Proverbio latino medieval 5.      La huerta y la mujer, por la mañana las has de ver. Refranero 6.      Quién llora por todo el mundo, acaba por perder los ojos. Proverbio turco 7.      La gran dama debe tener tres ezas: belleza, nobleza y riqueza. Refranero 8.      Una calamidad pública es un poderoso nivelador. Edmund Burke 9.      Bella por natura, hasta la sepultura. Refranero 10.    Quien se irrita contra la calumnia, le da crédito....

Los mártires de Quintuelles

  LOS MÁRTIRES DE QUINTUELLES A romería más sonada en Fabricia y sus contornos era la romería de los Santos Mártires de Quintueles. La capilla está enclavada en lo alto de un monte, allí, donde trepan las cabras, por senderos inviolados de pisada humana. El árgoma y el helecho ornamentaban aquella arquitectura salvaje, primitiva, sin huellas de civilización. Subir a la ermita en una florida tarde de junio, cuando el sol se desmayaba entre celajes áureos, era empresa tan tentadora para cualquier mozo o moza de aquellos andurriales, que se juzgarían indignos de habitar en aquellas breñas si un solo año faltasen a la romería. Era menester no tener en las venas pizca de sangre cantábrica, no haber bailado jamás el xirigüelo ni haber hecho corro en la danza prima, para no saborear el encanto de aquella romería perfumada de amor y de tomillo. A la mañanita, cuando ya el sol asomaba su cara burlona sobre el monte, sonaba la diana. y veíase al gaitero haciendo prodigios con su fuelle, m...

LAS VOCALES DE COLORES

LAS VOCALES DE COLORES Perdonad que os hable de mí mismo. Hace días me sucedió una cosa extraña. Estaba después de comer en mi cuarto, cuando me llamaron desde el gabinete en donde se encontraban mi madre, mi hermana, mi hermano y dos amigos, uno estudiante de medicina y el otro teniente de ingenieros, los cuales responderían de la veracidad del hecho que voy a referir. —Vamos a ver—me preguntó al entrar mi hermano de repente. —¿A ti de qué color se te representa la le­tra A? —¿Cómo de qué color? —Sí; ¿Qué color te viene a la imaginación cuando se pronuncia A? —Pues así... una cosa clara..., algo blanco, —¿Y la E? —Amarillo. —¿Y la I? —Rojo. Cuando dije esto, y lo dije no sé por qué con ver­dadera seguridad, se miraron unos a otros con asombro. —¿Y la U? — Siguió preguntando mi hermano. —Azul... o violeta. —¿Y la O? —Pardo... Obscuro... Una cosa así. —Pues los tres hermanos habéis asignado a cuatro vocales los mismos colores—dijo el estudiante asom­brado. En la O tú has contestado pard...